Mantecadas mexicanas
Las mantecadas mexicanas son una de las recetas y de los postres más tradicionales en el territorio azteca, aunque se utilizan con más frecuencia en cumpleaños, no debes esperar a estas fechas para saber todo lo que su preparación requiere, ya que a partir de ahora las podrás hacer en casa.
Ingredientes
Para la preparación de estos ricos bizcochos en forma de mantecadas, tendrás que reunir los siguientes ingredientes:
• 1 pizca de sal.
• 1 cucharada de levadura, se requiere que sea levadura instantánea.
• 2 huevos grandes.
• 125 gramos de harina.
• 125 gramos de azúcar.
• ½ taza de aceite vegetal.
• ½ taza de leche.
• 1 cucharada de vainilla o esencia de naranja.
• Ralladura de naranja.
• 1 cucharada de polvo para hornear.
Pasos
Una vez tengas todos los ingredientes, procura separarlos de acuerdo a las medidas que vas a necesitar para preparar esta receta. Cuando esto esté listo, debes comenzar a seguir cada paso a profundidad para tener las mantecadas mexicanas perfectas.
Paso 1
Precaliente el horno a 180 grados y coloca en el molde para mantecadas, los capacillos de papel.
Paso 2
En una taza coloca la harina, el polvo para hornear y la levadura, luego resérvalo. Mientras que, en otra taza deberás colocar el azúcar y los huevos, en este caso deberás batir hasta que todo el azúcar se haya disuelto por completo.
Paso 3
Procede a añadir la leche, la esencia ya sea de vainilla o naranja, y la ralladura de naranja. Debes mezclar nuevamente.
Paso 4
Ve añadiendo el aceite de forma gradual y lenta, mientras vas mezclando hasta lograr una mezcla uniforme y homogénea.
Paso 5
A esta mezcla tendrás que añadirle la que reservaste en el primer paso junto con una cucharada de sal. Debes seguir mezclando, pero no tanto. Luego déjalo reposar por 15 minutos aproximadamente.
Paso 6
Añade la mezcla al molde que ya tienes listo. Debes cocinarlo por 20 minutos en el horno, luego dejarlos enfriar por un par de minutos y ya están listos para degustarlos.
Las mantecadas mexicanas duran en perfecto estado, es decir crujientes y frescas por dos o tres días. Por lo que podrás tener una exquisita merienda durante varios días.
